Noche de sinceridad con flores incluidas

Así, nos tocó coincidir en la 98-2001, un día en la cafetería así sin más se fue a sentar ahí conmigo y un amigo porque eso la caracterizó siempre, alegre, pasó y la conocí y ya sabía yo quien era ella y ella creo, sabía quien era yo.

Puntuales momentos como aquel equipo en multimedios donde de alguna manera yo era quien llevaba al equipo y ella sufriéndole un poco con esa materia pero yo de alguna manera comencé ahí ese rol que luego me llevó a ser el asesor, seleccionado por mis compañeros, aunque a decir verdad lo gané por chanchullo de las organizadoras que eran mis amigas, aunque la verdad es que fueron críticas y premiaron a quien lo merecía.

Se vivieron cosas, como eso en el seminario cuando al leer la carta de los papás pues la niña se empieza a reír y nos contagia... después recordar ese día, sábado, al terminar todo ahí en el marqués de cuevas, viéndola contenta y cantar después del evento este de las cartas, siendo feliz, y compartiendo.

Así se forjó esa amistad que luego se reforzaría al organizar la graduación y ser ella la coordinadora, y apoyarla y estar con ella se convirtió en algo importante, además, estando related con la ex-niña se convirtió en una fuente de apoyo, alguna vez lo dije aquí... una especie de mentora que me fue llevando por el camino... tal vez ahora eso sería algo que no me gusta mucho pero en fin.

La tradición fue que nos tomáramos la foto siempre, nació por ahí el día de la graduación de la prepa, y de ahí en más en la reunión del 2004 esa foto fue requerida mutuamente y el sábado también, por decisión mutua.

La verdad es de que tenía ya 2 años y medio sin verla... un gran lapso de tiempo, y como que las cosas habìan sido ya solo de un mail aquì, otro allá... ni en el messenger hablábamos ya... y es que ella siempre se mantenía ocupada y demás.

El día de la graduación de mi sister fue el reencuentro, la vi, sí... y me vio, y me fue a saludar, efusivamente, bueno sí... a quienes estaban al lado fue de hola como están... y a mi fue diferente, 2.5 años después lo ameritaban. La seguí viendo, platicaba yo con ella, me criticó mi acento regio... en una secuencia incluso que vi a mis compañeros de generación bailar en bola, fui ahí, me metí, me extendió la mano y dimos un pasito de baile, vueltecita incluida.

Luego el momento cuando platicaba con un tipo... pasó al lado, le pregunté por qué decía eso de que ya tenía el acento regio... me dijo que ya hablaba como norteño "i ..ñor!"

Y la conversación fue así.

Tipo - Oye y hablando de eso que tal las regias eh... guapas no?
El Ángel - Sí, mira las niñas de allá la verdad es que son muy guapas (con el brazo derecho abraza a la niña) pero ninguna regia está tan guapa como ella.
Tipo - ah y bueno, entonces por qué no te regresas a León.
El Ángel - Pues mira, lo he pensado, de hecho yo vine porque estaba seguro de que la iba a ver a ella... por ella si me vengo regresando.

La despedida emotiva, doble abrazo, me da su telefono, me dice que la contacte, que no dejemos de escribirnos más, que cuando vaya le mande un mail y nos vamos de antro, la abrazo de nuevo a mi amiga, que es genial, que la quiero mucho la verdad y que extraño incansablemente.

Luego he ido teniendo varios recuerdillos, como la vez que se implantó en la prepa aquella campaña como de buenos modales o algo así y ella andaba de vocera.

La primera vez que fui a un antro, tendría yo 18 años ya casi 19 y básicamente fue después de la graduación en el cumpleaños de una amiga donde nos queríamos ya ir... pero otras amigas empezaron a desesperar a los demás porque nomás no se decidían y en eso que ella me dice "oye ya vámonos, vente conmigo" y que nos vamos al antro con otras amigas, jeje el Dante era, creo.

Ah y como no aquel viaje a NY, donde después de algunos días exhaustivos, caminando y desvelados, pues llegamos a la ONU a esperar que nos dejaran entrar y ella así cayéndose del sueño, pues va a ser que la niña pasó la visita a la ONU durmiéndose en mi hombro porque no podía consigo misma.

Organizar la graduación fue un placer, definitivamente aprendí demasiado de ella.

Muchas flores sí, porque a final de cuentas, sea como fuere el sentimiento que he generado dos o tres veces con ella.... al final del día puedo decirles que ella rifó, rifa y rifará en esta vida para mi. Ahora mismo el sentimiento es un poco más afectivo porque lo que pasó el Viernes 1 de Diciembre y la madrugada del 2 en el Refugio, fue una nueva experiencia para mi.

Y no me arrepiento...

Este post ha requerido de varias sentadas a ser actualizado, revisado, lo amerita esta niña.

Dios, cuídala siempre, y que sea feliz, jeje... muy feliz, como siempre.

Ya solo le falta ser del Madrid.

Adiós!